Mar 2, 2012

Protección Total Contra Agua

En el hemisferio sur nos encontramos en pleno verano. Aunque casi entrando al final del mismo, existen muchos países en donde las altas temperaturas veraniegas perduran por varios meses más. Y aunque en el hemisferio norte nos encontramos en pleno invierno, no pasará mucho tiempo para que el tan ansiado verano llegue, y con él, nuestros paseos a la playa, lagos, ríos, piscinas etc.

¿A qué me refiero con todo esto? Simple. No es ningún misterio para nadie que al realizar nuestras excursiones de verano, llevamos siempre con nosotros nuestros dispositivos electrónicos. Estos varían desde celulares, cámaras digitales de video y/o fotografía, tabletas, smartphones, reproductores mp3, lectores digitales y más. Honestamente, ¿quién no ha sufrido un percance con alguno de sus dispositivos y agua?

Pues bien, me toca sincerarme. Hace algunos años me sumergí en un lago con el celular en el bolsillo, sin darme cuenta. Felizmente, mi celular recobró su vida luego de 3 días bajo un sol ardiente que logró secar completamente hasta el interior del móvil.

El verano pasado, mientras nos encontrábamos disfrutando de unas vacaciones familiares en las playas de Carolina del Norte -Wrightsville Beach, para ser más exactos- mi hijo mayor se metió al mar sin percatarse que tenía su iPhone en el bolsillo. Pasaron cerca de 15 minutos en el mar antes que se diera cuenta que junto a él, su iPhone también "disfrutaba" de las olas. Cuando se percató, fue demasiado tarde. Todo intento por revivir al iPhone fue en vano. Recurrimos a la conocida práctica -gracias a YouTube- de guardar el iPhone dentro de una bolsa de arroz. Pasaron 3 días, lo probamos, y nada. No funcionaba. Lo dejamos 3 días más en la bolsa. Lo volvimos a probar, y tampoco respondió. Luego de una larga e impaciente semana -para mi hijo, no para mí-, llegamos a la conclusión que el iPhone ya descansaba en paz.

Como yo soy una de esas personas que lleva todo tipo de aparato electrónico a la playa, empecé a investigar cual sería la mejor opción de protección acuática para mis dispositivos. Fue así que encontré a Dry Case. Como nos quedaban aún varios y destinos playeros, salí rápidamente del hotel en busca de algún establecimiento que vendiera estas fundas, hasta que lo encontré.


Al probarlo, mi sorpresa fue total. La primera prueba que realicé no fue con el iPhone en la funda, sino más bien con un pedazo de papel. Al ver que el papel salió totalmente seco, me armé de valor y coloqué mi iPhone adentro del Dry Case. La prueba fue totalmente satisfactoria.

Al día siguiente, en la playa, ya no me volví a preocupar si a mi iPhone le entraba agua o arena. El sistema doble de sellado del Dry Case es impresionante. Primero, en la parte superior, por donde entra el dispositivo a usar, cuenta con un sistema de seguridad con empaquetaduras a prueba de todo, y un tipo de candado a cada lado que proporciona un segundo nivel de seguridad. En la parte inferior, se encuentra una válvula para remover el aire del Dry Case y que el plástico transparente se "pegue" a la pantalla de nuestro dispositivo. Para remover el aire de la funda se puede utilizar una bombilla, incluída con la funda, o la boca misma.

Cuando el iPhone se encuentra en el Dry Case, es totalmente funcional, es decir, se puede acceder a todas las funciones, incluyendo llamadas telefónicas. Para esto, Dry Case incluye el adaptador que se conecta al iPhone y a través de la salida se puede conectar audífonos, parlantes para música, o si prefiere, su auricular Bluetooth®.



No existe duda alguna sobre el nivel de protección que el Dry Case provee contra sumersión en el agua. La verdad es que uno puede quedar muy tranquilo sabiendo que su dispositivo electrónico se encuentra seguro. Inclusive, me atreví a nadar en el agua por espacio aproximado de 30 minutos y mi iPhone salió ileso!

Ahora, ¿el Dry case es perfecto? No, y les explico por qué. Primero, las dimensiones no son exactas para el iPhone. Esta es una funda generalizada que se puede utilizar con un sin fin de dispositivos, y no fue diseñada para un dispositivos en particular. Entonces, al ser más grande que el iPhone, se torna un tanto incómodo en determinados momentos, por sus dimensiones. Segundo, como ya es de conocimiento general, yo prefiero tener mi iPhone con mínima protección, es decir, con protector de pantalla, protector posterior, y los bordes. Por tal motivo, mi iPhone tiene el Invisible Shield Full Body. Cuando procedí a remover mi dispositivo de la funda Dry Case, todo el protector de la pantalla se salió. El proceso de aspiración a través de la válvula del Dry Case es tan efectivo, que la pantalla del iPhone prácticamente se pegó al plástico y es así que el Invisible Shield se quedó adentro. Lo pude rescatar y colocar nuevamente sin problemas -casi ni se nota-, pero tener que hacer esta maniobra cada vez que use el Dry Case resulta demasiado inconveniente. Entonces, cuando el dispositivo tiene protectores de pantalla o algo similar, resulta muy laborioso removerlo del Dry Case, y las posibilidades de que salga sin el protector son muy elevadas.

Nuevamente, el nivel de protección que el Dry Case provee es insuperable. Sin embargo, tiene un par de inconvenientes que cuando se colocan en la balanza, pueden favorecer al hecho de usarlo. En lo personal, lo continúe usando hasta el regreso a casa y me proporcionó tranquilidad.

Dry Case también fabrica una funda para el iPad o cualquier otra tableta, así como audífonos de alta calidad a prueba de agua, como también accesorios para sus fundas. Pueden visitarlos en su página web.